Angustia y zozobra, son palabras
sinónimas de la ansiedad. Esa sensación tan incómoda que nos llena de temor y
preocupación. Sin consecuencias, además de causarnos incomodidad emocional,
puede somatizarse en nuestro peso. Estar angustiados puede hacer que ingiramos
más cantidad de comida, lo que evidentemente, trae una variación en nuestro
cuerpo, pero más allá del comer, la ansiedad produce un desbalance en la
hormona cortisol, responsable de la acumulación de la grasa abdominal.
Algunas recomendaciones para que
puedas ganarle a la ansiedad y que tu figura no se vea afectada son:
-Fórmate un hábito. Sientas lo
que sientas, has el esfuerzo de siempre comer a la hora y despacio, no
atiborres de comida. Trata de poner tu mente en blanco cuando comas, es decir
no pienses en los problemas, en todo lo que te queda por hacer, etc.
-Nada de televisión. Procura no
comer frente a la TV eso te hace perder concentración, te distrae.
-Si la ansiedad por algunos momentos es casi incontrolable, cálmala con frutas. No optes por las chucherías, sino ten a la mano una manzana, un cambur, ciruela, mandarina, etc. frutas que puedas llevar en tu cartera y te las puedas comer en cualquier lugar.
-Si la ansiedad por algunos momentos es casi incontrolable, cálmala con frutas. No optes por las chucherías, sino ten a la mano una manzana, un cambur, ciruela, mandarina, etc. frutas que puedas llevar en tu cartera y te las puedas comer en cualquier lugar.
-Toma agua. La
ansiedad también la puedes controlar con bastante agua. Si quiere evitar comer
por impulso, ingiere un vaso de agua y espera 20 minutos para ver si la
necesidad desaparece.
-Escucha
música. Por una música que te distraiga que te haga olvidar la situación
angustiante. Calmando tu ansiedad, te sentirás mejor anímicamente y tu cuerpo
te lo agradecerá.
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